Los expertos dicen que:
Las almendras son una buena fuente de vitamina E (combate el envejecimiento y previene algunas enfermedades degenerativas), vitamina B2, magnesio, cobre y fosforo. También contienen grasos monoinsaturadas (ayudan a mantener la salud del corazón), aminoácidos y fibra insoluble. Sin embargo, las almendras no deben ser consumidas por enfermos del riñón o de la vesícula, pues contienen oxalatos.
Algunas enfermedades o problemas de salud que puedes mejorar con el consumo de almendras:
OBESIDAD Y SOBREPESO
Síntomas:
Índice de masa corporal inadecuado en relación con la edad y estatura.
Causas:
Mala alimentación, sedentarismo, genética y problemas hormonales.
Beneficios:
Algunos estudios sugieren que las almendras ayudan a bloquear parcialmente la absorción de los carbohidratos. Incluirlas en la alimentación hace menos susceptible el aumento de peso.
PÉRDIDA DE LA MEMORIA
Síntomas:
Olvidos frecuentes y falta de concentración.
Causas:
Edad (envejecimiento), episodios de estrés, desnutrición y deterioro de las células cerebrales.
Beneficios:
Las almendras tienen una gran cantidad de minerales, especialmente fósforo y vitamina E, que ayudan a fortalecer las células cerebrales relacionadas con la memoria.
SÍNDROME DE LA FATIGA CRÓNICA
Síntomas:
Afección que se manifiesta con sensación de cansancio o agotamiento prolongado que no se alivia con el descanso y que disminuye hasta en 50% la capacidad para desempeñar actividades cotidianas.
Causas:
Factores de edad, estilo de vida, enfermedad previa o desajustes del sistema nervioso.
Beneficios:
Los ácidos grasos esenciales, las vitaminas E y B, el potasio y el magnesio, presentes en las almendras, ayudan a la producción de energía y a fortalecer el organismo.