Dice un refrán: “De las cualidades del romero puede escribirse un libro entero”, ya que a esta humilde hierba se le atribuyen propiedades para mejorar la memoria, fortalecer el pelo, purificar el aire y embellecer la piel.
El romero es una hierba oriunda del Mediterráneo. Desde hace milenios es apreciada por sus cualidades medicinales y por la deliciosa sazón que le da a los alimentos. En la antigua Grecia se decía que favorecía la memoria, por esto los estudiantes se ponían romero en el pelo para aprender más y los deudos la usaban durante los funerales para no olvidar al difunto. En la Europa medieval se transformó en un símbolo de la fidelidad y se usaba como decoración en los matrimonios.
El romero pertenece a la familia de la menta y comúnmente crece en lugares cercanos al mar. Esta hierba se cultiva en los países mediterráneos, América y el occidente de Asia. Francia, España y Estados Unidos son los principales productores.
USO Y CONSERVACIÓN
El romero es una hierba muy aromática y tiene un sabor fuerte que no decae con la cocción, por lo que es importante usarlo moderadamente. En las cocinas mediterráneas se utiliza para darle sabor a los vegetales fritos en aceites de oliva y para marinar cordero, pollo y carnes rojas.
Es preferible utilizar romero fresco con las hojas pegadas al tallo, pues de esta forma conservan todo su sabor y aroma.
Un atado de romero es ideal para marinar carnes, ya que las impregna de su delicioso aroma.
El romero es excelente para elaborar panes rústicos, como la focaccia italiana.